Uno de los primeros experimentos con un sistema de votación a dos vueltas se dio en 1908 y 1911 en Nueva Zelanda, en las elecciones para el Parlamento. Poco después, el sistema fue abandonado. Sin embargo, hay ya más de 84 países que utilizan un sistema electoral a dos vueltas. Se trata, incluso, de más países que los que utilizan elecciones de mayoría relativa con una sola vuelta. En estos sistemas a dos elecciones, lo que a veces cambia es el porcentaje mínimo que necesita obtener el candidato que vence en la primera vuelta para ser declarado vencedor sin tener que ir al segundo balotaje.
En las elecciones de mayoría relativa, sistema que actualmente se utiliza en México, obtiene el triunfo el candidato o la candidata con el mayor número de votos emitidos. Sin embargo, puede ocurrir que el voto se fragmente si se presentan muchos candidatos, y uno de ellos pudiera obtener el triunfo con 30% o menos de todos los votos. Pero podría ser un candidato muy impopular para el resto de los votantes (70%).
Este método de elección a dos vueltas se utiliza para todos los puestos que son ocupados por una sola persona.
Para evitar este escenario, en algunos países se organizan las elecciones a dos vueltas. En Francia, por ejemplo, en la primera vuelta los electores votan por el candidato que más les atrae, de entre una lista quizás numerosa de postulantes. Se dice que se vota “con el corazón”. En esta etapa se determina quiénes son los dos candidatos con mayor número de sufragios, quienes se enfrentan en una segunda vuelta electoral, dos semanas después. Ahora los electores votan “con la cabeza” y gana el candidato que reúne la mayoría de votos.
En las elecciones de 2022 en Francia, el presidente Emmanuel Macron obtuvo 27.9% de los votos, seguido por Marine Le Pen con 23.2%. En la segunda vuelta, Macron obtuvo 58.5% y Le Pen 41.5%, por lo que Macron resultó ganador con una amplia mayoría.
Podría ser que un candidato obtuviera más del 50% de los votos en la primera elección. En ese caso, ya no es necesario ir a la segunda vuelta, pero en Francia esto nunca ha ocurrido para la presidencia, desde que existe el sistema electoral actual.
Este método de elección a dos vueltas se utiliza para todos los puestos que son ocupados por una sola persona, es decir, la presidencia, el parlamento, las alcaldías y los distritos electorales de diputados.
El método de votación en dos etapas fue propuesto por el general Charles de Gaulle. Antes, en el referéndum de 1962, los franceses habían votado a favor de que no fuera el parlamento el que eligiera al presidente, sino los ciudadanos mismos, por sufragio directo. En 1965, De Gaulle fue electo presidente de esa manera.
Con el sistema de votación a dos vueltas, el general quería abrir la puerta para que candidatos nuevos, independientes, pudieran participar en las elecciones. A diferencia de México, donde un candidato independiente requiere cientos de miles de firmas para participar en las elecciones, en Francia un candidato independiente necesita recabar únicamente 500 firmas de personas que ocupen un puesto de elección popular (hay 42 mil en todo el país). Fue, incluso, el caso del mismo Macron, miembro del Partido Socialista, quien renunció como Ministro de Economía y lanzó un nuevo partido con el que ganó las elecciones de 2017, en la segunda vuelta, con 66.1% de los votos.
La mayor ventaja es que, en la segunda vuelta, los electores se pueden reagrupar alrededor de los dos candidatos más populares.
En Brasil también se vota por la presidencia en elecciones a dos vueltas. Durante la transición de la dictadura militar a la democracia, en 1988, el presidente fue todavía electo por un colegio electoral. Con la nueva Constitución de 1988, en 1994 se realizaron las primeras elecciones presidenciales a dos vueltas. Los dos contendientes en la segunda ronda fueron Fernando Henrique Cardoso y Luiz Inácio Lula da Silva.
En Argentina, la Constitución de 1994 estableció también la elección presidencial directa y a dos vueltas, con la que ya se había experimentado en los años setenta. El 19 de noviembre de 2023 se disputó un nuevo balotaje en Argentina, entre el candidato de Unión por la Patria del oficialismo y ministro de Economía, Sergio Massa; y el candidato opositor de La Libertad Avanza, Javier Milei. Esto sucedió luego de que Sergio Massa obtuviera 36.6% de votos en la primera vuelta, y Milei consiguiera 29.9 %. El resultado de la segunda vuelta dio como ganador al candidato Javier Milei, quien se impuso con 55.7% del total de los votos, contra 44.3% para Massa.
La mayor ventaja de una votación a dos vueltas es que, en la segunda, los electores se pueden reagrupar alrededor de los dos candidatos más populares (o menos impopulares).